La Comisión Europea decidirá este miércoles la cuantía de la multa a España por no tomar medidas para reducir el déficit y salvo sorpresa de última hora propondrá darle dos años más, hasta 2018, para reducir el déficit por debajo del 3%, tal y como marca el Pacto de Estabilidad y Crecimiento (PEC), según varias fuentes europeas y diplomáticas.
Los comisarios se mantienen divididos entre pedir una multa cero o simbólica, es decir teóricamente menor al 0,2% del Producto Interior Bruto (PIB), equivalente a unos 2.000 millones de euros, en el caso de España, que establecen las normas como regla general, según ha reconocido a Europa Press una fuente de alto nivel comunitaria.
«Está abierto», ha admitido a Europa Press un miembro del Colegio de Comisarios, que este miércoles 27 de julio se pronunciarán sobre la cuantía de la multa a España y Portugal por incumplir su objetivo de déficit y presentarán la nueva senda fiscal para los próximos años.
La fuente ha admitido no obstante que «el estado de ánimo se ha rebajado» en torno al debate sobre la multa, si bien ha dejado claro que «está abierto» y que serán los comisarios los que fijen la cuantía. «Hay posibilidad de cancelarla», han subrayado otras fuentes europeas.
Otras fuentes diplomáticas confían en que haya una multa «benévola» para España, que contente a los partidarios de no reducir la multa a cero y sus defensores, entre ellos el comisario de Asuntos Económicos y Monetarios, Pierre Moscovici, partidario de la multa cero y que es el encargado de preparar la propuesta con el visto bueno del vicepresidente del Euro, Valdis Dombrovskis, quien era más partidario del ala dura de imponer una sanción, aunque sea mínima, al igual que el vicepresidente de la Comisión responsable de Crecimiento y Empleo, Jyrki Katainen.
«Hay que cumplir las reglas», ha esgrimido una fuente de alto nivel comunitario, para justificar el grupo de comisarios que piden no imponer una sanción cero. «Dombrovskis ha bajado el tono desde hace cuatro meses», han asegurado con todo otras fuentes europeas.
El Gobierno español en funciones da por hecho que la multa será «nula o cero», como ha dicho en reiteradas ocasiones el ministro de Economía y Competitividad, Luis de Guindos, incluido este domingo desde el G-20 en China, en cuyos márgenes tuvo ocasión de reunirse con Moscovici, según han confirmado fuentes comunitarias.
«El sentido común dice que no va a haber multa para España», aseguró el titular de Economía en funciones, asegurando que cuenta con el apoyo de sus homólogos alemán, francés e italiano en este sentido.
La propuesta de multa a España quedará automáticamente aprobada salvo que una mayoría cualificada de países rechace la recomendación de la Comisión en un plazo de diez días.
El Ejecutivo comunitario ha aplazado hasta después de verano su propuesta para congelar fondos estructurales y de inversión para España y Portugal por incumplir el déficit, a la espera de dialogar este punto con el Parlamento Europeo. En el caso de España, Bruselas podría pedir congelar hasta el 50% de los fondos, unos 1.000 millones de euros, aunque podría «recuperarlos» si cumple las medidas para rebajar el déficit, según fuentes comunitarias.
DOS AÑOS MÁS PARA ACOMETER LOS AJUSTES
Al margen de la cuantía de la sanción a España y Portugal por incumplir el objetivo de déficit, el Ejecutivo comunitario dará a conocer la nueva senda fiscal para que ambos países rebajen el déficit por debajo del 3%.
En el caso de España, la propuesta sobre la mesa es dar dos años más a España, hasta 2018, en lugar de uno para que acometa los ajustes necesarios para dejar el déficit por debajo del 3%.
«Esto es lo que está sobre la mesa. Lo tiene que decidir el Colegio», han confirmado a Europa Press fuentes europeas. «Esto deberá estar acompañado de esfuerzos (de ajuste)» por parte de España, han avisado otras fuentes comunitarias.
El Ejecutivo comunitario es partidario de fijar una senda «realista», para lo que tendrá en cuenta «los últimos datos disponibles», así como el contexto político, han explicado fuentes comunitarias.
Según las cuentas del Ejecutivo comunitario para apoyar su dictamen negativo, que fue respaldado por el Ecofin el pasado 12 de julio, España sumará un déficit público del 3,9 % en 2016 y de un 3,1 % en 2017, aunque la Autoridad Independiente de Responsabilidad Fiscal (AIReF) ha alertado de que el déficit puede desviarse entre el 4,1% y el 4,7% en 2016.
De acuerdo con el Programa de Estabilidad 2016-2019 el déficit debería reducirse del 5% del PIB al 3,6% en 2016 y al 2,9% en 2017.
De Guindos ha expresado su convicción de que el déficit volverá a situarse «por debajo del 3 % el próximo año» y ha pedido celeridad a la Comisión para fijar la nueva senda.
En mayo, la UE estableció una nueva senda del 3,7% del PIB en 2016 y del 2,5% en 2017, pero con la condición de que España redujera el déficit estructural en 0,25 puntos porcentuales este año y 0,50 puntos porcentuales el próximo, un total de 8.000 millones de euros.