CEPYME pone en valor el gran esfuerzo de la empresa española por mantener y crear nuevo empleo durante 2022, un año marcado por el fuerte incremento de costes en especial para las pymes.
El mercado laboral ha mostrado un buen comportamiento en el conjunto del año 2022, con la creación de 471.360 nuevos afiliados y un descenso del desempleo de 268.252 personas
No obstante, en diciembre ha continuado la senda de desaceleración que se viene observando desde mayo, con un incremento de la afiliación del 2,4% en términos interanuales, la menor tasa de los últimos veintiún meses. En el último mes del año, solo se han creado 12.640 empleos, una cifra considerablemente menor a la registrada en el periodo anterior a la pandemia y que supone el peor dato de afiliación de un mes de diciembre desde 2012.
La ralentización en la creación de empleo de los últimos meses junto a la destrucción de afiliación en importantes sectores como la industria (-10.706) y la construcción (-15.761) son signos evidentes del agotamiento del tejido empresarial. A esto se suma que, en diciembre, la afiliación de autónomos también fue negativa y disminuyó en 946 afiliados, situándose en total en 3.328.403 personas.
CEPYME ve con preocupación el entorno económico al que se enfrenta la empresa en 2023 y sobre todo la pequeña y mediana empresa. Los próximos meses van a estar muy condicionado por las dificultades que está atravesando la empresa, por lo que es necesario mantener la cautela debido al encarecimiento de los costes en las pymes, que en términos globales han registrado cotas de incremento en 2022 de más del 20%; a la enorme incertidumbre en el contexto internacional y al encarecimiento de la financiación debido a la política de incremento de tipos del BCE.
CEPYME recuerda que la mejor manera de apoyar al empleo es apoyar a la empresa y reitera el fuerte incremento de cargas que entran en vigor en 2023, ya sea a través de nuevas figuras impositivas, así como del incremento de las cotizaciones sociales, que suman más de 5 años consecutivos con subidas de bases de cotización y ahora también de tipos.
En cuanto a los datos de paro, la cifra total permanece por debajo de los tres millones de personas, en concreto, en 2.837.653 desempleados. En diciembre se ha producido una disminución de 43.727 parados registrados, una cifra que resulta inferior al descenso medio registrado en el periodo 2014-2019 (-58.951 personas). Aunque la tendencia a la baja se ha mantenido durante 2022, los cambios normativos en relación con los contratos temporales y con la figura del fijo discontinuo que introdujo la reforma laboral aprobada este año dificultan la interpretación del dato de desempleo al no ser comparable con la estadística anterior.
