Los datos de afiliación y paro del mes de noviembre confirman la resiliencia del mercado laboral, si bien reflejan una desaceleración en el ritmo de creación de empleo, acorde con la ralentización de la actividad económica.
La afiliación disminuye en 155 personas, muy por debajo de la media del periodo 2014-2019 en dicho mes. Sin embargo, aunque el número total de afiliados continúa por encima de los 20 millones, el ritmo de crecimiento interanual mantiene la tendencia de desaceleración por séptimo mes consecutivo, y se sitúa en el 2,69%. Además, el paro registrado se ha reducido en 33.512 personas, lo que contrasta con el incremento estacional que se registra tradicionalmente en este mes. Esta tendencia se explica, en parte, por el aumento de los trabajadores fijos discontinuos, que en periodos de inactividad no se contabilizan como parados, modificación incluida en la reforma laboral que entró en vigor este año. Este cambio genera cierta distorsión para poder analizar la evolución del dato de paro de forma exhaustiva.
CEPYME considera que estas cifras reflejan que, a pesar de la incertidumbre económica y el aumento de costes de producción, las empresas siguen esforzándose por mantener el nivel de empleo. No obstante, insiste en que, dado el entorno económico en el que nos encontramos, el mercado laboral en los próximos meses va a estar muy condicionado por las dificultades que están atravesando las empresas, debido al encarecimiento de sus costes y a la enorme incertidumbre en el contexto internacional. En este sentido, CEPYME pide cautela de cara a 2023, dada la incertidumbre económica existente debido a las consecuencias de la guerra de Ucrania sobre la inflación, el encarecimiento y suministro de energía y, en general, el generalizado incremento de los costes de producción, que van a afectar a la actividad especialmente de las empresas de menor dimensión y, en consecuencia, al mercado laboral.
La cifra total de paro registrado permanece por debajo de los tres millones de personas, en concreto, en 2.881.380 desempleados. En términos corregidos de efectos estacionales, el paro registrado baja notablemente, en 61.595 personas, lo que supone una caída más intensa que lo habitual en este mes en años previos a la pandemia.
La afiliación a la Seguridad Social aumentó en todos los sectores de actividad, a excepción de los servicios, que registra un descenso de 21.190 personas, la mayor parte de ellos en hostelería, coincidiendo con el fin de la temporada estival. En este sentido, destaca el incremento en la construcción (11.530 personas). Por su parte, en la agricultura y en la industria se observó un incremento de 4.713 y 4.791 personas, respectivamente.
La contratación ha continuado descendiendo en noviembre, hasta los 1.424.283 contratos, un -6,6% menos que en octubre. En tasas interanuales se agudiza la tendencia a la baja, con un descenso del –29,5%. La contratación indefinida también ha caído, hasta los 615.263 contratos, un –11,8% menos que en el mes anterior. Los contratos indefinidos concentran el 43,2% del total de la contratación en noviembre, frente al 14% de un año atrás.