Los datos de paro y afiliación del mes de marzo continúan siendo relativamente favorables, con aumento del empleo y descenso del paro, aunque a un ritmo más reducido, sin que se haya notado todavía el impacto de la guerra entre Rusia y Ucrania en el mercado laboral durante este mes.
Sin embargo, estos datos no aminoran la realidad del mercado laboral español, donde la cifra de parados sigue siendo muy elevada (algo más de 3 millones) y todavía hay una cifra elevada de trabajadores en ERTE.
Además, de cara a los próximos meses, se mantiene un elevado grado de incertidumbre y preocupantes riesgos que amenazan el proceso de recuperación económica y se han intensificado desde el inicio del conflicto bélico entre Rusia y Ucrania. A ello hay que añadir los cambios introducidos sobre el despido a las empresas que sufran las consecuencias de la crisis energética y de la guerra en Ucrania, que generan una “inseguridad jurídica” añadida para las empresas, especialmente para las más pequeñas, y que pueden retraer sus decisiones de contratación en los próximos meses.
CEPYME recuerda que las empresas de menor tamaño son las más vulnerables en los momentos de crisis y advierte de que probablemente en los próximos meses los efectos de la guerra y de la crisis energética y de suministros se traducirán en una revisión a la baja de las perspectivas de crecimiento, que afectará a la creación de empleo, reduciendo su ritmo de avance.
La afiliación a la Seguridad Social se incrementó en el mes de marzo en 140.232 personas en promedio mensual, cifra muy similar al aumento medio registrado en este mes en el periodo 2014-2019 antes del estallido de la pandemia (+139.682 empleos), lo que sitúa la cifra total de afiliados en 19.834.505. En términos desestacionalizados, los afiliados han aumentado por undécimo mes consecutivo, aunque a un ritmo más moderado. En concreto, en marzo crecieron en 23.998 personas.
En este período, el paro se redujo en 2.921 parados, una caída moderada en comparación con la media del periodo 2014-2019 (-44.211 personas). Así, la cifra total de desempleados se sitúa en 3.108.763 personas. En términos desestacionalizados, el paro registrado aumentó en marzo en 25.682 personas, lo que supone el primer incremento desde abril de 2021.
El paro registrado aumenta en todos los sectores, a excepción de los servicios, donde desciende en 18.090 personas. En la construcción, el desempleo crece en 5.664 personas, mientras que en la agricultura se incrementa en 1.568 personas y en la industria aumenta en 1.173 personas. El desempleo también sube en el colectivo sin empleo anterior (+6.764 personas).
En cuanto a la contratación, destaca el buen comportamiento de la contratación indefinida, con 513.677 contratos indefinidos registrados, que suponen el 30,7% del total de los contratos realizados en el mes. Comparado con marzo de 2019 se han realizado 334.000 contratos indefinidos más y 372.000 contratos temporales menos. Aunque todavía es pronto para analizar los efectos de la reforma laboral, las empresas durante estos meses se deben familiarizar con la nueva normativa de contratación temporal y adaptar sus modalidades de contratación.
El número de trabajadores protegidos por ERTE vinculados a la COVID-19, procedentes de alguna de las modalidades de ERTE puestas en marcha durante la pandemia, ha cerrado marzo en 79.441 personas, lo que representa el 0,5% del total de afiliados. Sin embargo, destaca el incremento de los trabajadores afectados por ERTE no COVID, que aumentaron hasta los 17.162, 3.587 más que en el mes anterior.
