Los sectores en los que los fondos soberanos fueron más activos son el tecnológico, con el 25% de las operaciones; servicios (18%) y ciencias de la vida (17,6%), según el último Informe fondos soberanos 2020, elaborado por el Center for the Governance of Change de IE University, en colaboración con ICEX-Invest in Spain.
El informe analiza 165 operaciones por valor de 43.000 millones de dólares. Estados Unidos, Emiratos Árabes Unidos, China, India y México son los destinos de la mayor parte de la inversión soberana en 2020.
El informe ha sido presentado en un acto online, inaugurado por la secretaria de Estado de Comercio, Xiana Méndez, y la decana de la IE School of Global and Public Affairs, Susana Malcorra. Por su parte, el director del Sovereign Wealth Research del IE Center for the Governance of Change, Javier Capapé, ha detallado las principales claves de la publicación, que analiza las tendencias de estos grandes inversores internacionales durante 2020.
“Los fondos soberanos son un inversor de primer orden en España, no ya solo por su volumen, sino porque su presencia es estable a largo plazo y está altamente alineada con los objetivos de transformación productiva de España hacia una economía digital y más sostenible”, subrayó Xiana Méndez, secretaria de Estado de Comercio, durante su intervención. “Además, este informe refleja cómo la COVID-19 ha afectado a la actividad de los fondos soberanos en todo el mundo destacando que, a pesar de esta situación, España mantiene su capacidad de atracción de inversión y se sitúa entre los 10 principales receptores de inversión de fondos soberanos”.
Según sus autores, se observa la recuperación de las infraestructuras, ligadas al gas natural, transporte y telecomunicaciones, tras el análisis detallado de las 42 industrias donde invirtieron. También se mantiene la apuesta por el inmobiliario, con una inversión fuerte en el segmento industrial (almacenes, centros logísticos y naves industriales), unido a la apuesta contracíclica en oficinas y hoteles, tanto pre como pospandemia, que se demuestran valiosos para los inversores de largo plazo.
En el segmento tecnológico destacan las inversiones en empresas de alimentación sostenible, la búsqueda de fuentes de energía alternativa, el sector educativo (sobre todo el apartado de educación a distancia) y las empresas de fintech (pagos y neobancos, principalmente). Pierden peso las inversiones en soluciones de movilidad (muy invertidas en los últimos años). Los fondos soberanos participaron de manera prioritaria en empresas de biotecnología, muchas aún desconocidas y otras tan conocidas hoy por el desarrollo de vacunas frente al virus como BioNTech, CureVac o el proyecto detrás de la vacuna rusa, Sputnik V.
Con respecto al año anterior, el informe señala que las dosis de cambio en la inversión soberana se conjugan con la continuidad. Por destinos geográficos muestra una estabilidad excepcional, con inversiones por encima de la decena en Estados Unidos, China, Reino Unido e India respecto al número de operaciones de inversión.
Si se analiza el valor de las inversiones, sin embargo, aparecen dos países menos habituales en la parte alta de la tabla: Emiratos Árabes Unidos, por el mega-deal que cerró GIC junto a otros socios para gestionar los gasoductos de ADNOC, y México, por la adquisición conjunta de GIC y Abertis de un paquete accionarial de control en uno de los mayores operadores de autopistas del país.
Los fondos soberanos apuestan por el venture capital
Las inversiones en venture capital siguen siendo importantes en número de operaciones, pero la pandemia deja datos reveladores en el 2020.Tan solo seis fondos consiguieron mantener su presencia en rondas de inversión de venture capital en este año complejo. Esta concentración contrasta con los 10 fondos distintos que participaron en rondas de financiación en 2019 o los 14 fondos soberanos que lo hicieron en 2018. Solo los fondos con equipos propios y una estrategia estructurada mostraron esta fortaleza. Destacan en este campo, un año más, los fondos de Singapur (Temasek y GIC) acompañados de cerca por el emiratí Mubadala, cuya estrategia descrita en el Informe anterior, empieza a dar resultados.
Además, el informe analiza la evolución de los sectores más dañados por la pandemia y aquellos que salen beneficiados por los cambios estructurales que la emergencia mundial ha acelerado. La crisis ha levantado nuevas barreras regulatorias en países receptores habituales de inversión y plantea dudas sobre el desarrollo futuro de las cadenas globales de valor, en particular en sectores estratégicos como la energía o la salud.
Otros sectores, como el inmobiliario logístico, se muestran especialmente atractivos para los fondos soberanos dada la fortaleza presente y futura del comercio electrónico. De hecho, los grandes operadores logísticos en Europa y Estados Unidos cuentan con alianzas estratégicas o están controlados por fondos soberanos de China, Abu Dabi o Singapur. Este segmento supera al de oficinas y hoteles, como el nicho de inversión inmobiliaria más frecuente y valioso.
Geográficamente, el informe incide en dos regiones más: China y América Latina. El apartado “A fondo” de este año se centra en China Investment Corporation, su evolución desde su fundación y los retos actuales: enfocarse en la economía doméstica o buscar oportunidades rentables en mercados maduros donde la regulación y la competencia son exigentes. En América Latina, la prudencia macroeconómica ha permitido el uso de 13.000 millones de dólares en recursos para paliar los efectos de la crisis en la región y apoyar los programas fiscales y de ayuda directos implementados por los gobiernos. Destacan Perú, Colombia y Chile, en sus aportaciones.
“La industria de los fondos soberanos ha mantenido el rumbo de largo plazo en medio de las grandes turbulencias internacionales y domésticas del año de la pandemia. Se mantiene la inversión en fuentes de energía alternativa, empresas de alimentación innovadoras, tecnológicas y proyectos de biotecnología. Además, destaca la continuada apuesta por las infraestructuras en materia energética (gas natural) y de transporte, y por el inmobiliario industrial, acelerado por las restricciones de movilidad y el crecimiento del consumo electrónico y el teletrabajo. Sin embargo, la crisis ha mostrado su cara más dura en la caída del valor total de las operaciones y también en el freno en el número de fondos que participan en operaciones de venture capital. No todos los fondos han podido mantener esas apuestas de riesgo cuando sus economías pasaban por apuros que han necesitado su atención y capital. Fueron creados, muchos de ellos, como “rainy-day funds” y la tormenta sanitaria, económica y financiera está siendo fuerte”, destaca Javier Capapé, director del Sovereign Wealth Research del IE Center for the Governance of Change de IE University y editor del informe.
España, atractiva para la inversión de fondos soberanos en el año de la pandemia
España mantiene su capacidad de atracción de inversión soberana y mejora su posición relativa. Se sitúa en el top 10 de países receptores de inversión, con 12 operaciones en el periodo enero 2019-septiembre 2020, de nueve fondos soberanos distintos, por un valor cercano a los 1.300 millones de euros, prácticamente en línea con los datos del informe anterior, en un año marcado por una caída de la inversión extranjera directa global de más del 42%.
Los fondos invirtieron en España y empresas españolas en sectores tan variados como el inmobiliario, donde destaca la adquisición de un hotel de lujo por parte de GIC, el activo fondo de Singapur. Además, destaca la entrada de fondos soberanos en el capital de empresas industriales y manufactureras de bienes de equipo para la industria automovilística y la renovable eólica; junto al continuado interés por el sector alimentario y el de infraestructuras.
Al menos nueve fondos soberanos diferentes han invertido en España en este periodo. Se mantiene el interés de fondos importantes, como el mencionado GIC de Singapur y los de Catar y Emiratos Árabes Unidos (Mubadala). Además, este año destaca Sopef (el fondo soberano de coinversión establecido por COFIDES y el Oman Investment Authority), que ha realizado sus cinco primeras inversiones. Se esperan otras 4-6 operaciones en los próximos meses.
Puedes descargarte el Informe fondos soberanos 2020