Efectivamente, la mediación no sólo sirve para resolver asuntos familiares.
En realidad, cualquier disputa que sea susceptible de obtener una solución negociada es mediable. La mediación es un procedimiento rápido y económico de resolución de conflictos de manera privada y pacífica dirigido por un mediador que fomenta un mejor diálogo entre las partes. Como bien dice, los notarios, funcionarios públicos a los que el Estado atribuye la función de dar fe pública y controlar la legalidad, reúnen muchas de las características inherentes a la mediación: preparación, independencia, imparcialidad o garantes de la seguridad jurídica. Le aconsejo que acuda a un notario mediador para que le pueda plantear todas las dudas que tenga sobre su conflicto empresarial y la posibilidad de resolverlo mediante la mediación. Los colegios notariales tienen o colaboran con centros de mediación donde podrán orientarle. http://cort.as/5ggO