Llegan el verano y las vacaciones, momento en el que desconectamos del trabajo, pero no del móvil. La dependencia actual a los smartphones y dispositivos móviles provoca que no nos separemos prácticamente en ningún momento del ellos, ya estemos de viaje, en la playa o en la piscina.
Esta necesidad estar conectados constante se traduce en una búsqueda continua de conexión y accesos a internet en cualquier lugar en el que nos encontramos, ya sea a través de los datos 4G, tarifas de roaming para el extranjero o a través de redes WiFi de acceso público y gratuito. Y son precisamente estas últimas conexiones inalámbricas una de las pasarelas por donde más les gusta pasearse a los cibercriminales, ya que aprovechan las habituales bajas medidas de seguridad de este tipo de redes para acceder a los dispositivos de todos los usuarios conectados.
Según Eurostat, España fue el país de la UE con más internautas víctimas de algún robo de identidad durante 2017, un 7% de los usuarios de internet fueron víctimas, tres puntos porcentuales por encima de la media europea. Uno de los accesos para estos ataques son las redes WiFis abiertas. “Los dispositivos actuales muestran de forma automática las redes wifis disponibles y pueden ser una tentación para no gastar datos ni roaming durante las vacaciones. Pero hay que tener muy presente que los atacantes suelen ofrecer una WLAN de acceso libre a modo de señuelo o trampa para capturar el tráfico de datos o distribuir malware en los dispositivos conectados, y por lo tanto suponen un riesgo real para la protección de nuestra información”, alerta Ricardo Maté, director general de Sophos Iberia.
Para prevenir sustos durante el periodo estival Sophos Iberia, ofrece varios consejos para poder conectarnos con seguridad a redes WiFI públicas durante el verano:
- Borra el rastro digital. Tras navegar por una red abierta y hacer uso de distintas aplicaciones y páginas webs, borra el rastro digital que tu ruta ha dejado. Para ello se aconseja borrar el historial de navegación y las cookies, borrar los archivos temporales del navegador y cerrar las sesiones de todos los lugares donde hayas ingresado con tu usuario y contraseña.
- No accedas a información bancaria. Uno de los consejos fundamentales es no visitar ningún sitio sensible ni acceder a servicios de banca o de comercio online en los que se realicen pagos electrónicos a través de una red abierta que no sea confiable. El robo de datos puede no ser detectado hasta pasado un tiempo y los atacantes podían acceder a las cuentas bancarias y los datos de las tarjetas de crédito sin que te dieses cuenta.
- Garantiza el acceso seguro a tus redes sociales. Dado que no entrar en las redes sociales durante las vacaciones es casi misión imposible, es aconsejable proteger el acceso a las redes sociales, mediante la autenticación en dos pasos, el cambio de contraseña o cerrando la sesión cada vez que salgas y entres en la aplicación.
- Protege tu cuenta de correo electrónico. Si vas a utilizar el correo electrónico para enviar fotos o compartir información durante las vacaciones, se recomienda no utilizar la misma cuenta en la que se cuente con información sensible. Del mismo modo, si prefieres utilizar la cuenta de correo para subir fotos o archivos a la nube, es preferible crear una un usuario específico para esto y así minimizar el robo de información en el caso de sufrir un ataque.
- No descargues archivos adjuntos. La curiosidad puede ser peligrosa, y querer saber qué contiene un archivo que recibes desde una procedencia dudosa puede ser cómo abrir la puerta de tu dispositivo a los ciberdelincuentes. De igual modo, descargar archivos adjuntos de páginas web o documentos informativos, puede ser también un riesgo mientras estés conectado a una red wifi pública.
- Antivirus para el móvil siempre. Al igual que ya está consolidada la conciencia de contar con un antivirus para los ordenadores, esta concienciación debe extenderse también a los actuales ordenadores de bolsillo que son nuestros smartphones. Los teléfonos móviles están sustituyendo en capacidad y funciones a los ordenadores y cada vez los usamos para más cosas, por eso es fundamental contar con un software de seguridad que proteja los accesos y la información que almacenan nuestros móviles o dispositivos con conexión a internet.
“Los dispositivos móviles forman parte integral de nuestras vidas y como custodios de nuestros datos más sensibles y valiosos son uno de los objetivos más comunes de ataque para los ciberdelincuentes. Un estudio reciente de SophosLabs llegó a identificar hasta 3.5 millones de apps potencialmente sospechosas en Android de las cuales el 77% eran malware. Hoy en día hemos asimilado con cierta naturalidad que los ciberataques aparezcan en las noticias, por lo que deberíamos ser también conscientes de que los móviles son dispositivos vulnerables que suponen un alto riesgo cada día que no los protegemos adecuadamente.”, recuerda Maté.