El coste del dinero en efectivo se ha incrementado en casi un 4% en España tras la entrada en vigor, el pasado 1 de enero, de la normativa que regulaba las comisiones en los cajeros automáticos, según estudio realizado por Popular Payments, que pone de manifiesto que los consumidores podrían ahorrar más de 32 euros mensuales si decidieran efectuar sus compras en tiendas físicas con tarjeta o ‘smartphones’.
«En total, cada español podría guardar en su bolsillo más de 390 euros cada año si en vez de acercarse a los cajeros utilizaran los medios de pago digitales a la hora de realizar desembolsos», indica el informe.
El estudio tiene en cuenta varios informes que calculan que el coste de los medios de pago para la sociedad representa entre el 2% y el 3% del PIB y que el efectivo es el sistema más caro con entre el 60% y 70% del total del coste.
Además del ahorro de las comisiones cobradas al extraer dinero de los terminales, existen otras variables que influyen en el menor coste del pago con tarjeta frente al efectivo, como la eliminación de las comisiones de las cuentas por parte de algunas entidades a condición de utilizar un número determinado de veces al mes la tarjeta.
El ahorro del pago con tarjeta se refleja también a la hora de efectuar transacciones en comercios físicos de países con diferente moneda a la nacional, ya que el cambio de divisa es siempre más favorable en el pago directo con tarjeta que a través del cambio de dinero en efectivo, con un ahorro que puede superar el 2% en cada operación.
MAYOR SEGURIDAD
El estudio destaca que este tipo de transacciones garantiza el producto o servicio prestado ya que, al pagar con tarjeta, «el cliente puede reclamar el importe íntegro si éste no se prestase satisfactoriamente, y permite además un mayor control del gasto, pues todos los movimientos económicos están informatizados y quedan registrados de forma exhaustiva y pormenorizada».
A esto se une el aumento de la seguridad de la propia persona, puesto que deja de llevar dinero en efectivo en la cartera, y el ahorro del tiempo que supone desplazarse hasta el cajero.
El director general de Popular Payments, Jaime Domingo, ha señalado que se trata de una medida que favorece la creación de una cultura de pagos digitales en España, «de forma que los consumidores obtengan el impulso necesario para adquirir nuevos hábitos de compra que dinamicen el mercado».