La llegada de tablets o smartphones a las empresas ha supuesto que grandes cantidades de información se pongan en riesgo.
“Los datos que almacenan los empleados son cada vez más valiosos, por ello hay que cuidar al máximo los niveles de seguridad de los dispositivos, ya que se han convertido en el objetivo de los cibercriminales”, señala Mario García, director general de Check Point para España y Portugal. “Sin embargo, apostar por la seguridad no debe poner en jaque la privacidad. La estrategia de ciberseguridad tiene que estar equilibrada entre las necesidades de la empresa, la privacidad del usuario y la sencillez de uso”, añade García.
3 elementos clave para proteger dispositivos móviles
Ante el auge del BYOD, el reto empresarial pasa por proteger la información corporativa que se comparte a través de dispositivos portátiles y crear un entorno de trabajo seguro. Ante este potencial riesgo de pérdida de datos, Check Point señala 3 elementos claves para proteger la información almacenada en dispositivos móviles:
- Separar los datos de negocios de los datos y aplicaciones personales: dispositivos como los USB se utilizan para almacenar información personal y profesional indistintamente y, en la mayoría de los casos, en un mismo dispositivo. Esto supone un riesgo muy elevado de pérdida de datos, por lo que es fundamental mantener la información profesional separada de la personal.
- Experiencia de uso segura, accesible y sin límites: contar con una mayor seguridad no debería perjudicar la experiencia de uso. Por tanto, es igualmente importante proporcionar acceso seguro y sin problemas a las aplicaciones empresariales (correo electrónico, contactos, documentos, etc.).
- Evitar la pérdida de datos de dispositivos móviles: en muchas ocasiones los dispositivos móviles no cuentan con los niveles de seguridad necesarios para entornos corporativos, por lo que es necesario aportar herramientas extra necesarias para reducir el riesgo de pérdida y/o fuga de datos.
En definitiva, la proliferación de dispositivos móviles personales en el puesto de trabajo ha hecho que la línea divisoria que separa los negocios de lo personal se haya desvanecido, por lo que le número de vulnerabilidades de seguridad a las que las compañías se enfrentan ha crecido tanto en número como en variedad. Por tanto, crear un entorno corporativo que facilite y potencie la seguridad de los datos tanto dentro como fuera de la red de negocio se ha convertido en una necesidad para cualquier empresa, por lo que se hace indispensable dedicar recursos a esta área.