La Comisión Europea ha lanzado este martes la convocatoria de ayudas a programas para la promoción de productos agroalimentarios tanto en el bloque comunitario como en el resto del mundo en 2019, que cuenta con un presupuesto de 191 millones de euros de los cuales 2,5 millones están reservados a los productores de aceitunas negras.
Esta convocatoria está abierta a distintos tipos de organizaciones, como asociaciones profesionales, grupos de productores o grupos agroalimentarios con actividades de promoción y las campañas se desarrollan generalmente durante un periodo de tiempo de tres años.
Las propuestas deben ser presentadas antes del 16 de abril a través del portal ‘online’ específico del Ejecutivo comunitario, que evaluará todas ellas y anunciará los beneficiaros en otoño.
El montante reservado para la promoción de aceituna negra de mesa forma parte de la cantidad reservada para programas simples en terceros países, que en conjunto asciende a 75 millones de euros. Además de los 2,5 millones para la aceituna de mesa, esta partida incluye 25,25 millones para la promoción de productos europeos en China, Japón, Corea y el sudeste y sur de Asia, 22 millones para Canadá, Estados Unidos, México y Colombia y 25,25 millones para «otras áreas geográficas».
Bruselas también ha reservado una partida de 20 millones de euros para programas simples de promoción de productos agroalimentarios dentro de la UE, 43 millones para programas múltiples en el bloque comunitario y otros 43 millones para programas múltiples en terceros países.
Los llamados programas «simples» son aquellos que han sido presentados por una o varias organizaciones de un mismo Estado miembro, mientras que los programas calificados como «múltiples» son aquellos presentados por al menos dos organizaciones de dos o más países o por una o más organizaciones europeas.
El objetivo de aquellos programas que se centren en la promoción interna de productos europeos será impulsar los diferentes sistemas de calidad comunitarios y los productos biológicos. Asimismo, una parte de los fondos están dedicados a sectores específicos –como arroz, fruta y verdura– seleccionados de forma específica para impulsar una dieta sana entre los ciudadanos europeos.