A lo largo de tu vida profesional, continuarás encontrando cambios, grandes o pequeños, positivos y negativos, voluntarios e involuntarios.
Cuando experimentas estos cambios, tienes dos opciones. Puedes resistirlo activamente o puedes aceptarlo y descubrir qué puedes aprender y cómo aprovechar la situación. En la mayoría de los casos, este último suele ser la opción inteligente.
A continuación figuran cuatro de los cambios más comunes que puedes esperar ver en el trabajo, y cómo lidiar con ellos para que puedas continuar prosperando en el lugar de trabajo.
Conseguir una promoción
Suponiendo que tu promoción tiene más responsabilidades, probablemente necesites aprender a dominar tus nuevas tareas, y no podrás hacerlo de manera eficiente si tienes que hacer eso sobre tu viejo trabajo.
Esto requiere confiar en otras personas, lo que puede ser difícil si tienes tendencias de control. Así que comienza a aprender a soltar tus tendencias de microgestión y confía en que no eres el único que sabe cómo hacer todo.
Reestructuración de la empresa
Muy pocas cosas hacen que los empleados estén tan ansiosos como una reorganización de la compañía. Independientemente de si sobrevives o no a la reorganización, seguro que enfrentarás grandes cambios.
El primer paso, cualquiera que sea el resultado, es reconocer lo que ha pasado. Luego, lentamente, reconstruye tu confianza evaluando qué tipo de oportunidades puedes realizar ara crecer, y si existen vacíos en tus habilidades que puedas llenar.
Si la reorganización genera un despido, se recomienda que tan pronto como tengas tiempo para procesar las noticias, informes a tu red de contactos y demás que estás buscando trabajo.
Un nuevo Jefe
La felicidad y éxito en tu trabajo tiene mucho que ver con la relación que tienes con tu jefe. Puedes pasar mucho tiempo construyendo esta relación, pero las personas continúan y un día pueden irse. Te encuentras informando a alguien nuevo, y quieres establecer su confianza y respeto, rápidamente.
¿Cómo lo haces de una manera que no parezca alardear o peloteo? Puedes comenzar a conocer sus objetivos, estilos de trabajo y cualquier idea nueva que pueda tener, y trabajar para modificar tus prioridades cuando corresponda. Sé proactivo/a en términos de identificar dónde podrían necesitar ayuda; esa es una manera fácil de asegurar algunas victorias rápidas para ayudarte a brillar, lo que crea buena voluntad rápidamente.
Un cambio en la cultura y los procesos de la compañía
A veces, la apariencia de la empresa cuando te uniste no se parece en nada a la compañía en la que todavía trabajas años después. Esto es especialmente común en una startup, que tiende a comenzar sin estructuras y sistemas. A medida que la empresa escala, esas cosas se vuelven necesarias y, a veces, puede cambiar la cultura de la empresa.
El primer paso es reconocer que la estructura no es necesariamente algo malo, y simplemente aceptar el hecho de que viene con el crecimiento de la compañía.
Si crees que hay algunas culturas que la empresa solía tener y que deseas restablecer, existen formas en que puedes hacerlo sin necesitar la aprobación de los superiores. En el caso de Airbnb, por ejemplo, la compañía de compartir el hogar se encontró con demasiadas reuniones internas a medida que la empresa crecía. ¿Su solución? empezaron a filmar las reuniones y a editarlas en contenido digerible, lo que resolvió un problema y eliminó la burocracia innecesaria.
Tu cerebro puede ser reacio a cambiar pero, con el tiempo y un cambio de perspectiva, puedes aprender a aceptarlo. Y si te entrenas para sentirte cómodo/a con la incertidumbre, tal vez solo veas oportunidades como resultado de esos cambios, que de otro modo no hubieras tenido.