La ministra de Trabajo, Migraciones y Seguridad Social, Magdalena Valerio, ha anunciado este jueves que gracias a las cartas a empresas que se mandaron en agosto tras detectar que había más de 80.500 contratos temporales que habían superado su tiempo legal establecido, un total de 46.554 contratos de estos 80.000 han pasado a ser indefinidos, lo que supone un porcentaje de conversión de casi el 58%.
Así lo ha señalado la titular de Trabajo durante un desayuno informativo organizado por Nueva Economía Fórum, donde también ha asegurado que está de acuerdo en que esta actuación, establecida dentro del marco del Plan Director por un trabajo digno, puede ser «una gota de agua en el océano de precariedad, pero da idea del compromiso del Gobierno de cambiar las cosas y la decisión de algunas empresas de replantearse las políticas de contratación».
Preguntada sobre la conversión de los otros 40.000 contratos temporales en indefinidos, la ministra ha afirmado que estos no se han transformado todavía y siguen siendo temporales. Según Valerio, la Inspección de Trabajo investigará el por qué.
Valerio ha recalcado que los datos de agosto «no fueron nada buenos», pero que también es verdad que se registraron un 33% más de contratos indefinidos que en el mismo periodo del año anterior, lo que supuso un total de 153.000 contrataciones indefinidas, «las más altas registradas en toda la serie histórica».
«Es verdad que tenemos una excesiva temporalidad, pero parece que se vislumbra una senda en positivo», ha resaltado la ministra, tras insistir en que «hay que apostar por un empleo más estable». «Parece que vamos a un mercado laboral con contratos más justos y menos precarios», según Valerio.
La titular de Trabajo también ha afirmado que el Gobierno sabe que la recuperación económica no está siendo justa ni en términos de salarios ni de reducción de desigualdades. Sin embargo, «se están dando pasos en la buena dirección».
Además, ha asegurado que el Gobierno quiere que el país avance, pero no de cualquier manera, sino cumpliendo con los objetivos de la agenda europea 2030. «Las cosas están cambiando y lo estamos haciendo con una metodología participativa, con los agentes sociales y económicos, con el Parlamento, las comunidades autónomas y las corporaciones locales», ha asegurado.
LA FORMACIÓN, «UN PILAR FUNDAMENTAL»
La ministra también ha hecho hincapié en que es imprescindible que la formación sea «un pilar fundamental a lo largo de toda la vida». Respecto al empleo joven, la ministra ha señalado que la situación «no es justa» y ha recalcado que el país no se puede permitir que la tasa de desempleo de los jóvenes esté por encima del 34%.
En esta línea, ha alertado de la pérdida de talento y oportunidad por falta de oportunidades para jóvenes, que acabaron yéndose del país. Así, ha anunciado que el Gobierno está trabajando en un Plan de retorno del talento para que estas personas vuelvan y se reintegren al mercado laboral español, con la idea de aprobarlo antes finales de año.
Preguntada sobre la derogación de la reforma laboral, Valerio ha resaltado que desde su primer día en el Gobierno dijo que no iba a derogar la reforma laboral, ya que «cuentan con los diputados que cuentan» y el Gobierno prefiere invertir el tiempo en asuntos que de partida sabe que van a prosperar. Pese a ello, cree que sí que puede hacer consensos razonables sobre cuestiones que ya se están debatiendo en el Parlamento.
DESACELERACIÓN ECONÓMICA MODERADA
Respecto al ritmo de la economía, la ministra de Trabajo ha dejado claro que sí que se vislumbra cierta desaceleración moderada, pero que esto no está ocurriendo sólo en España, sino que también se está dando en otros países.
«No soy partidaria de caer en el triunfalismo, pero tampoco de las profecías autocumplidas», ha afirmado Valerio, tras afirmar que espera que esta desaceleración «no tenga excesivo impacto en materia laboral».
En esta línea, ha resaltado que, aunque los datos de desempleo de agosto «no han sido los mejores», se está viendo que en la recaudación de la Tesorería General de la Seguridad Social (TGSS) está habiendo un incremento por encima de lo que habíamos imaginado en materia de cotizaciones.
En el discurso, la ministra ha hablado del presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, y ha afirmado que «hay que tener una fuerza especial para navegar en las aguas en las que él está navegando». «Quizás estos valores son los que algunos más temen y quizás por eso se le ataca con dureza», según Valerio.
«Ahora nos hacen preguntas y las resolvemos, a los problemas los llamamos por su nombre e intentamos buscar soluciones, no somos perfectos y nos equivocamos, pero rectificamos si es necesario», ha recalcado Valerio.
Antes de la intervención de la ministra, el embajador de España ante la OCDE, Manuel Escudero, ha afirmado que el PSOE está a la vanguardia en políticas con ministros como Valerio. «Son los mimbres con los que sí será posible ir construyendo en el futuro un nuevo edificio para una nueva socialdemocracia, para un socialismo ciudadano», ha apostillado.
Para Escudero, España hoy tiene un modelo laboral «caduco y exprimido hasta la extenuación», basado en ganar competitividad por la devaluación salarial, la temporalidad y la precariedad. «Los trabajadores padecen aún las consecuencias de este modelo cortoplacista, porque la recuperación no ha llegado aún a las amplias capas de la población», ha añadido, tras afirmar que Valerio es una persona «con el sentido de Estado necesario» para asegurar también el poder adquisitivo de las pensiones.
Al acto han asistido la ministra de Política Territorial y Función Pública, Meritxell Batet; la secretaria de Estado de Empleo, Yolanda Valdeolivas; el secretario de Estado de la Seguridad Social, Octavio Granado; la secretaria de Estado de Migraciones, Consuelo Rumí; el presidente de CEOE, Juan Rosell; y el presidente de Cepyme y candidato a presidir CEOE, Antonio Garamendi.
También han acudido la presidenta del PSOE, Cristina Narbona; la exvicepresidenta del Gobierno y exministra de Economía, Elena Salgado; el exministro de Trabajo Valeriano Gómez; el secretario general de CC.OO., Unai Sordo; el secretario general de UPTA, Eduardo Abad; el secretario de Empleo y Relaciones Laborales en la Ejecutiva Federal del PSOE, Toni Ferrer, y el diputado de Ciudadanos, Sergio del Campo, entre otros.