El paro se ha incrementado en 47.047 personas en el mes de agosto, mientras que la afiliación a la Seguridad Social se ha reducido en 202.996 personas, según los datos difundido hoy por el Servicio Público de Empleo Estatal (SEPE).
Estos datos reflejan el peor comportamiento de un mes de agosto desde 2011 en el caso del paro y desde 2008 en cuanto a los datos de afiliación a la Seguridad Social y confirman la ralentización en la recuperación del empleo.
Respecto de agosto de 2017, el paro se ha reducido en 200.256 personas, lo que sitúa su nivel de bajada interanual en el -5,92%. La cifra total de parados registrados es de 3.182.068 personas.
Asimismo, se incrementa el desempleo de los jóvenes menores de 25 años en 3.189 (1,34%) personas en relación con el mes anterior y aumenta en 43.858 (1,51%) entre los que tienen 25 y más años.
El paro se ha incrementado en agosto en todas las Comunidades Autónomas, registrándose los mayores crecimientos en Cataluña (11.594 parados más) y Andalucía (8.284 parados más).
En cuanto a la afiliación a la Seguridad Social, en términos interanuales, el Sistema suma de media 529.970 afiliados más, un incremento del 2,89%, lo que significa el mantenimiento del ritmo de creación de empleo.
En el Régimen Especial de Trabajadores Autónomos (RETA) hay que resaltar que la tasa interanual aumentó un 1,12%, casi el doble que en agosto de 2017 (0,67%), lo que se traduce en un crecimiento de 36.135 personas, frente a las 21.443 del año anterior.
En cuanto a la contratación, en agosto se registraron 1.439.091 contratos, de los que 153.921 fueron contratos indefinidos, lo que supone un incremento del 33’40% respecto del mismo mes del año anterior. Se tarta de la cifra de contratos indefinidos mas alta registrada en el mes de agosto en toda la serie histórica y suma 55 meses de incrementos encadenados de la contratación indefinida.
CEPYME recuerda que agosto no suele ser un buen mes para el empleo por el fin de la campaña estival, si bien los datos registrados en esta ocasión son los peores de los últimos años. Ello refleja una pérdida de impulso en la creación de empleo, consecuencia del menor ritmo de crecimiento de la economía y de la caída de la afiliación en los sectores de educación, industria manufacturera y construcción, principalmente.
Para la Confederación, es urgente abordar las reformas pendientes e impulsar políticas que reactiven la actividad económica y la creación de empleo, especialmente en las pymes, así como evitar generar mayores incertidumbres, derivadas del anuncio de incrementos de la fiscalidad o nuevas figuras tributarias que penalizan la actividad productiva y la recuperación del empleo, que deben seguir siendo las prioridades de nuestro país en estos momentos.
