El crecimiento del sector privado de la zona euro se moderó en julio a su nivel más bajo de los dos últimos meses, según el índice PMI compuesto, que bajó a 54,3 puntos desde los 54,9 del mes anterior, después de que solo Alemania entre las grandes economías del euro mejorase sus cifras de actividad, mientras que España registraba la peor lectura del índice, con 52,7 puntos, el menor ritmo de expansión en 56 meses.
Entre las economías analizadas, Irlanda registró en julio el mayor dato de PMI compuesto, con 56,8 puntos, su mínima en 4 meses, por delante de los 55 puntos de Alemania, su máxima en 4 meses, así como de Francia, con 54,4 puntos, su mínima en 2 meses, y de Italia, con 53 puntos, su peor lectura en 2 meses, mientras que España, con 52,7 puntos, registró su peor lectura en 56 meses.
El factor principal responsable de un crecimiento más lento de la actividad total fue un incremento más débil de los nuevos pedidos recibidos, indicaron los autores de la encuesta, señalando que el crecimiento de los nuevos pedidos fue el segundo más lento en más de un año y medio y únicamente mejoró en Alemania.
Aunque las empresas continuaron mostrándose optimistas de cara a los próximos doce meses, el grado de confianza descendió hasta su mínima de 20 meses, después de que el dato mejorase ligeramente en Alemania y Francia, pero disminuyera en Italia, España e Irlanda.
«Las cifras finales del PMI confirman que la economía de la zona euro comenzó el tercer trimestre desde un nivel más bajo», indicó Rob Dobson, director económico de IHS Markit, añadiendo que si la trayectoria del índice PMI se mantiene, el crecimiento trimestral del PIB en el tercer
trimestre será «prácticamente igual al 0,3% del segundo trimestre».
A este respecto, el experto apuntó que la mejora de la demanda interna puede compensar a corto plazo parte del empeoramiento de las condiciones del mercado por las tensiones comerciales, señalando que el mayor crecimiento observado en Alemania, si se mantiene, debería ayudar en este sentido, especialmente si puede ayudar a revertir las expansiones más débiles en Francia, Italia y España.