El uso de bolsas de papel aumentó un 15% en 2017, según los fabricantes que destacan que está «en todo tipo de comercios» y que se emplea en siete de cada diez comercios minoristas, desde zapaterías, tiendas de moda, equipamiento del hogar, ópticas, etcétera.
El sector destaca también que el 66% de las panaderías y pastelerías utiliza bolsas de papel sin asas y son las que se utilizan de forma «ampliamente mayoritaria» en el sector de comida a domicilio.
Su uso en el comercio se ha consolidado como una alternativa «natural» y «preferida» para consumidores y comerciantes, según una encuesta de LinQ para los fabricantes asociados.
En concreto, concluye que dos de cada tres consumidores recomendaría que los comercios entregaran bolsas de papel y que el 63% de los consumidores considera que la bolsa de papel proporciona a los comercios una imagen significativamente mejor y la puntúan con un 7,8 sobre 10. Los comerciantes se pasan a la bolsa de papel conscientes de sus ventajas medioambientales y de las preferencias de los consumidores.
Respecto al sector de los supermercados, la ‘bolsadepapel’ señala que el año 2018 está siendo, sin duda «el año de la implantación» del uso de bolsas de papel en supermercados lo que demuestra su adaptación a todo tipo de comercio.
Por otro lado, el sector de la entrega de comida a domicilio a través de Internet el uso de bolsas de papel es la solución «mayoritariamente elegida», según la encuesta, por su capacidad de conservación, fácil uso y buena imagen que ofrece de los restaurantes y las empresas de reparto.
Las características de la bolsa ideal para el consumidor son que sea fuerte y resistente, reutilizable, reciclable, adecuada a lo que se compra, sostenible, biodegradable y renovable.
En base de este retrato robot de la superbolsa, el 69% de los consumidores se fía a la bolsa de papel para sus compras en el supermercado.
Asimismo, indica que el 88% de los consumidores quiere poder elegir en el supermercado entre bolsa de papel o de plástico. Pero además lo observa como una clara opción a favor de la bolsa de papel. En concreto, a mismo precio, el 70% de los consumidores elegiría en el supermercado bolsas de papel para sus compras e incluso un 20% afirma que estarían dispuestos a pagar más por la bolsa de papel.
Precisamente, los atributos que más valoran los encuestados es que son biodegradables, ecológicas y renovables. El carácter biodegradable es «el elemento diferencial definitivo, que las convierte en la mejor alternativa al plástico», según ‘labolsadepapel’.
El sector recuerda que si una bolsa de papel no llegase a entrar en el circuito del reciclado, se biodegradaría en un plazo de entre dos y cinco meses, aunque en España se recicla 7 de cada 10 bolsas de papel.
En cuanto a su resistencia, el Instituto Tecnológico del Embalaje, Transporte y Logística ha desarrollado un protocolo de ensayo de reutilización de las bolsas de papel que incluye pruebas de fatiga y perforación y pruebas en húmedo, con frutas refrigerados, que muestra un excelente comportamiento de las bolsas de papel para los distintos usos en cuanto a resistencia.
Por ejemplo, en productos de alimentación, la bolsa de papel de formato pequeño con asas, similar a la bolsa de plástico de asas tipo camiseta, aguanta hasta más de 12 kilos; la de grandes almacenes y tiendas especializadas, la bolsa mediana con asa puede cargar hasta 14 kilos. Las bolsas tipo sobre sin asa pueden con cinco kilos o más si es de formato mediano y dos quilos o más si es de formato pequeño.
