El Gobierno ha aprobado este viernes en el Consejo de Ministros la primera partida de 150 millones de euros del Plan 300×100, con el que el Ejecutivo quiere que en 2021 todos los núcleos de población de España tengan acceso a Internet de al menos 300 Mbps, principalmente a través de fibra óptica hasta el hogar (FTTH).
En concreto, este primer tramo de ayudas, que se concederán en régimen de competencia competitiva, está financiado con 30 millones de euros que proceden de los Presupuestos Generales del Estado (PGE) y 120 millones de euros con cargo a fondos comunitarios FEDER.
Además, supone un 43% más que los 105 millones de euros que se adjudicaron para este fin en la convocatoria de 2017 del Plan de Extensión de la Banda Ancha (PEBA), un «notable incremento» que se debe al buen funcionamiento del programa y a la decisión de extender la cobertura de banda ancha como un objetivo prioritario dentro de la estrategia del Gobierno para la transformación digital de España.
La ayuda se enmarca en el Plan 300×100 para la extensión de la banda ancha que presentó el pasado miércoles el presidente del Gobierno, Mariano Rajoy, en Teruel, que contempla la inversión de 525 millones de euros entre 2018 y 2021 para llevar Internet de alta velocidad al 100% de los núcleos de población que existen en España.
En un comunicado, el Ministerio de Energía, Turismo y Agenda Digital resalta que el objetivo del plan es «acelerar la extensión de la cobertura de las redes de banda ancha de muy alta velocidad, apoyando su despliegue en las zonas sin cobertura actual ni prevista en los próximos tres años, denominadas zonas blancas».
En la rueda de prensa posterior al Consejo de Ministros, el ministro de Educación, Cultura y Deporte y portavoz del Gobierno, Íñigo Méndez de Vigo, ha subrayado que este «importante» plan va a contribuir a «mejorar la competitividad del país» y ayudará a dar respuesta al reto demográfica que supone la despoblación de los núcleos rurales.
«Mejorar las comunicaciones, facilitar la comunicación y ayudar a los intercambios comerciales será posible gracias a la entrada en funcionamiento de este plan», ha incidido el ministro, quien ha destacado, por ejemplo, lo que puede significar en campos como la educación o los intercambios culturales.
Asimismo, ha destacado que España ha sido «normativamente previsora» durante los últimos años en el despliegue de redes, lo que ha permitido que a finales de junio de 2017 el 76,1% de la población disponía de cobertura de redes con velocidad de acceso a Internet superior a 100 Mbit/s, un porcentaje que en el Ministerio de Energía, Turismo y Agenda Digital calculan que a finales de diciembre era ya del 82,9%.
El Ministerio afirma que las claves del éxito en el despliegue de infraestructuras de banda ancha de muy alta velocidad han sido «el marco regulatorio, la inversión privada y la inversión pública mediante el PEBA NGA (Plan de Extensión de la Banda Ancha de Nueva Generación)».
En concreto, destaca que, desde 2013 hasta 2017, el PEBA-NGA ha financiado con 216 millones de euros de ayudas públicas proyectos para llevar la fibra a 3.586.311 viviendas y empresas, en 4.064 entidades singulares de población de mediano y pequeño tamaño que antes no tenían cobertura.
