La secretaria de Estado de Economía y Apoyo a la Empresa, Irene Garrido, ha afirmado este viernes que se prevé que la inflación siga moderándose en los primeros meses del año y se registre una «bajada sustancial» del IPC en enero y febrero, y ha dicho que «lo lógico» es que se produzca una «normalización» salarial ante una recuperación «consolidada».
En la rueda de prensa para valorar los datos del IPC de diciembre, cuya tasa interanual se moderó seis décimas, hasta el 1,1%, una décima menos del dato adelantado por el INE hace dos semanas, Garrido ha destacado que la menor inflación se debe en gran medida a la desaceleración del precio de los productos energéticos que se explica por el efecto base del fuerte repunte que registró en diciembre de 2016.
Garrido ha indicado que la bajada del IPC en diciembre también se explica en menor medida por la desaceleración de los precios de alimentación no elaborada y servicios, y ha apuntado que las previsiones son que la inflación siga moderándose en los primeros meses del año.
En concreto, prevé una «bajada sustancial» de los precios en enero y febrero en relación a la tasa del 1,1% de diciembre, si bien ha matizado que hay que seguir «vigilantes» respecto a la evolución de los precios energéticos, especialmente del precio del petróleo.
Asimismo, Garrido ha indicado que el IPC tuvo un crecimiento nulo en diciembre a nivel mensual, frente al repunte del 0,6% del mismo mes del año pasado, al tiempo que el IPC subyacente -no tiene en cuenta las partidas más volátiles, como energía y alimentación no elaborada– se mantuvo en el 0,8% interanual.
A su vez, la variación interanual del IPC armonizado se redujo seis décimas respecto a noviembre, hasta el 1,2%, frente al 1,4% en la zona euro, con lo que se registró un diferencial de inflación favorable para España de dos décimas, así como en el IPC subyacente armonizado, que se mantuvo en el 0,9%, frente al 1,1% de la zona euro.
«LO LÓGICO ES QUE HAYA NORMALIZACIÓN SALARIAL»
La ‘número dos’ de Economía ha destacado que los convenios pactados en 2017 registraron una subida salarial del 1,4%, por encima del incremento del año anterior (+1%).
«Los convenios colectivos van a ser el resultado de la negociación entre empresarios y trabajadores y lo lógico es que se produzca una normalización de los salarios y así se está empezando a producir», ha remarcado Garrido quien ha recordado que España presenta una recuperación económica «muy consolidada» de cuatro años consecutivos, con los tres últimos con un alza del PIB por encima del 3% y creación de medio millón de empleos anuales, con 600.000 afiliados en 2017.
No obstante, ha matizado que no se puede olvidar de cara a los acuerdos salariales que todavía hay una tasa de paro del 16%, baja productividad y que hay que continuar con el reto de mejorar la tasa de desempleo mediante la creación de puestos de trabajo para que la recuperación «llegue a todos».
