La confianza del consumidor subió medio punto el pasado mes de agosto en relación al mes anterior, hasta situarse en 108,8 puntos, tras mejorar la valoración que hacen los ciudadanos de la situación actual, según los datos publicados por el Centro de Investigaciones Sociológicas (CIS).
Con el avance de agosto, la confianza de los consumidores se sitúa en máximos históricos y suma tres meses consecutivos al alza después de haber retrocedido 1,3 puntos en mayo.
En concreto, la mejora de la confianza de los ciudadanos en agosto se deba al incremento del índice de situación actual, que avanzó dos puntos en relación al mes anterior, hasta un nuevo máximo histórico de 105,4 puntos, que compensó el descenso en un punto del índice de expectativas, hasta 112,1.
Tanto el indicador de la confianza del consumidor como el índice de la situación actual vuelven a superar en el mes de agosto sus máximos históricos y la diferencia entre la valoración de la situación actual y las expectativas, siempre favorable a esta última, se sitúa en el punto más bajo de toda la serie.
Según el CIS, la evolución del índice de valoración de la situación actual es resultado del comportamiento positivo de dos de sus tres componentes. Así, la valoración de la evolución general de la economía aumentó en 3,2 puntos y la de la situación de los hogares creció en 3,1 puntos, con lo que la primera se sitúa marca un nuevo máximo en su serie y la segunda alcanza su segundo mejor registro, a menos de un punto de su máximo histórico de agosto de 2005.
Por su parte, la percepción de las posibilidades del mercado de trabajo retrocedió de forma muy moderada (-0,3 puntos), si bien sigue situándose en valores no alcanzados en ningún otro año de la serie.
El indicador de expectativas, por su parte, retrocedió en un punto respecto al mes anterior, hasta situarse en 112,1 puntos, con una evolución bastante heterogénea de sus tres componentes. Así, las expetactivas respecto a la situación futura de la economía crecieron 0,4 puntos, mientras que las relativas al mercado de trabajo descendieron de forma más acusada (-2,1 puntos) y las expectativas sobre la evolución de los hogares limitaron su descenso a -1,3 puntos.
En relación a los datos de agosto de 2016 la evolución de la confianza del consumidor creció 11,5 puntos, con un crecimiento en términos absolutos para la valoración de la situación actual de 15,3 puntos, mientras que las expectativas limitan su crecimiento a 7,7 puntos.
El ICC recoge mensualmente la valoración de la evolución reciente y las expectativas de los consumidores españoles relacionadas con la economía familiar y el empleo, con el objetivo de anticipar sus decisiones de consumo. El indicador recoge valores de entre 0 y 200, considerándose que por encima de 100 la percepción es positiva y por debajo, negativa.
EL 43,1% DE LOS ENCUESTADOS LLEGA JUSTO A FIN DE MES
En general, el 26,5% de los encuestados por el CIS entiende que la situación económica actual es peor que la de hace seis meses, mientras que el 35,6% no aprecia cambios y el 36,4% estima que ha mejorado.
De cara a los próximos seis meses, el 43,2% de los entrevistados confía en que el estado de la economía será mejor, frente al 26,8% que auguran un empeoramiento y el 25,2% que no espera cambios.
El ICC de agosto muestra que el 43,1% de los entrevistados llega justo a fin de mes y que el 36% ahorra poco dinero cada mes. De hecho, el 11,1% afirma que ha tenido que echar mano de sus ahorros para llegar a fin de mes. Por el contrario, sólo el 3,3% dice que ahorra bastante cada mes.
El 10,7% de los entrevistados afirma que ahora hay más personas en paro en su entorno que hace seis meses, y el 25,8% piensa que la situación en España para encontrar un empleo es peor que la de hace seis meses, mientras que el 37,4% cree que la situación no ha cambiado y el 33,9% que ha mejorado.
Cuando se les pregunta por la evolución del empleo de cara a los próximos seis meses, un 30,5% de los encuestados piensa que la situación empeorará, frente al 41,8% que cree que mejorará y el 21,9% que considera que permanecerá sin cambios.
Preguntados por si tienen en mente comprar una vivienda durante el próximo año, el 95,2% de las personas entrevistadas asegura que no y sólo el 4,7% planea adquirir una. El 28,5% de los encuestados opina que el precio de la vivienda se mantendrá el próximo año, mientras que el 5,6% cree que bajará y el 60,9% que subirá.
