El dato mejora en once puntos el de hace dos años y sitúa a España por encima de la media global.
El 56% de los directivos de compañías españolas considera «alto o muy alto» el grado de digitalización de sus empresas, lo que supone once puntos más que el 45% registrado hace dos años, según recoge la Décima Encuesta Mundial sobre el Coeficiente Digital de las Empresas, elaborada por PwC.
La consultora destaca que este avance de las empresas españolas contrasta con el paso atrás que han dado las compañías a nivel global, donde el porcentaje de los directivos y responsables de Tecnologías de la Información (TI) que cree que el grado de digitalización de sus empresas es alto y muy alto ha caído quince puntos, del 67% al 52%, en relación a 2015.
En esta línea, añade que la mejora del grado de digitalización, además de situar a las empresas españolas por encima de la media mundial, las coloca en línea con la mayoría de países desarrollados como Italia (48%), Reino Unido (55%), EEUU (59%) y algo lejos de Alemania (65%).
Asimismo, el estudio refleja que la confianza de las empresas globales a la hora de sacar el mayor partido posible de las tecnologías digitales está más bajo que nunca, debido a la rápida y continúa proliferación de las nuevas tecnologías digitales y a que las empresas son cada vez más conscientes de la dificultad que supone integrarlas y aprovecharlas al máximo.
Respecto a las tecnologías más disruptivas, las empresas españolas consideran que el Internet de la Cosas (IoT), la Inteligencia Artificial y la robotización van a ser las tres tecnologías que más van a transformar el entorno empresarial en los próximos cinco años, por delante de la impresión en 3D, de la realidad aumentada o de los drones.
Cuando se les pregunta sobre en cuáles ya están acometiendo inversiones significativas, el 62% dice que en el Internet de las Cosas, el 58% en Inteligencia Artificial, el 18% en realidad aumentada y el 16% en robótica.
«Las compañías españolas continúan incrementando su inversión en tecnología, principalmente, en el análisis de datos a través del Internet de las Cosas y de la Inteligencia Artificial, y en la robotización de procesos con el objetivo tanto de aumentar los ingresos como mejorar la eficiencia y productividad», ha remarcado el socio responsable de Consultoría en PwC, Cesar Calleja.
MOTIVOS PARA DIGITALIZARSE
Respecto a los motivos por los que las empresas acometen procesos de digitalización, un 73% de los encuestados en todo el mundo y el 82% de los españoles menciona el aumento de los ingresos, mientras que un 47% a nivel global y un 44% en España dice que es para ser más rentables.
Las otras respuestas más comunes fueron para mejorar la experiencia de cliente (34% a nivel global y 38% en España) y para ser más eficientes y reducir sus costes (40% global y 32% España).
De esta manera, PwC remarca que la disrupción «no es en sí mismo un objetivo para las empresas a la hora de emprender su transformación digital, a pesar de la evidencia de que las nuevas tecnologías y los nuevos modelos de negocio están reinventando multitud de sectores y mercados».
Por otro lado, los obstáculos a los que se enfrentan las empresas tiene que ver según el 34% de los encuestados en España y el 22% a nivel mundial con la falta de integración de las nuevas tecnologías y las ya existentes, por lo que «las inversiones de hace unos años son ahora un obstáculo para la digitalización».
Además, mencionan la rigidez y la lentitud de los procesos dentro de las empresas (28% de los directivos españoles y 21% de los globales) y que las compañías no cuentan con las capacidades necesarias en sus equipos (26% en España y 24% a nivel global).
El estudio de PwC se ha realizado a partir de entrevistas con 2.216 directivos y responsables de TI de 53 países, incluidos 50 españole, sobre el grado de digitalización de sus compañías, entendido este por cómo las empresas afrontan e integran este tipo de tecnologías.