La deuda pública y el desempleo limitan el rating de España, según la agencia de calificación crediticia.
La agencia de calificación crediticia Fitch ha revisado una décima al alza el crecimiento de la economía española en 2017, hasta el 2,6%, mientras que para 2018 pronostica que la expansión alcanzará el 2,1%, dos décimas por encima de la proyección de finales de enero, cuando confirmó el rating soberano ‘BBB+’ de España y mantuvo en ‘estable’ su perspectiva.
Así se desprende de la última actualización de las perspectivas del crédito soberano en Europa Occidental de Fitch, que aprecia que la nota de solvencia de la deuda soberana a largo plazo emitida por España está limitada por la deuda pública y el desempleo, aunque destaca el elevado valor añadido y la diversificación de la economía española, cuya competitividad se encuentra en máximos desde la crisis.
«Los ratings están limitados por los elevados niveles de deuda pública y deuda exterior y por una tasa de desempleo superior al 18%», señala la agencia de calificación, que, no obstante, subraya que el elevado valor añadido y la diversificación de la economía respaldan la nota de solvencia de España.
Asimismo, recalca la «solidez» de las instituciones españolas respecto a los países con el mismo rating e insiste en que la economía española está mostrando su «mejor nivel de competitividad» desde la crisis.
El pasado 27 de enero Fitch confirmó la nota de solvencia ‘BBB+’ de la deuda a largo plazo emitida por España, a la que asigna una perspectiva ‘estable’, al considerar que los altos niveles de desempleo, la incertidumbre política y los elevados niveles de deuda contrarrestaban la recuperación económica.