Dice que deben contribuir a «desatascar la interinidad de la política española» y pide «responsabilidad» a los grupos.
El ministro de Hacienda y Función Pública, Cristóbal Montoro, ha afirmado este martes que los Presupuestos de 2017 «impulsan la creación de empleo, fortalecen la cohesión social y refuerzan el crecimiento económico y la competitividad», y que deben contribuir a que «se desatasque la interinidad de la política española» y sirvan de «enlace» con los Presupuestos de 2018, ya que una semana después de su aprobación en junio se dará luz verde al techo de gasto del próximo año.
En la tradicional rueda de prensa en el Congreso para presentar el proyecto de Presupuestos Generales del Estado (PGE) para 2017, que este martes inician su tramitación parlamentaria, Montoro ha destacado que los PGE servirán para situar a España «en la puerta de salida» del procedimiento de déficit excesivo de la UE.
Montoro ha indicado que por las fechas en las que entra el proyecto de Presupuestos en la Cámara Baja, estas cuentas son también «un enlace con los PGE de 2018», dado que cuando sean aprobadas definitivamente en junio, a la semana siguiente el Consejo de Ministros abordará el techo de gasto para 2018. «Buena parte de lo que no esté contenido en estos PGE que se presentan en un año avanzado, lo estarán en los PGE de 2018», ha apuntado.
En este sentido, Montoro ha indicado que los PGE de 2017 hay que verlos «con perspectiva» y «no reducirlos a la expresión numérica de la apuesta de un Gobierno», por lo que ha subrayado que las cuentas de 2017 necesitan apoyos parlamentarios para salir adelante. «Somos un Gobierno en minoría y por tanto tiene que recabar esos apoyos», ha enfatizado.
LA RESPONSABILIDAD DE LOS GRUPOS
A su juicio, «desde el momento en que entran en la cámara se activa la responsabilidad de los grupos políticos que se sientan en la cámara. Se les hace corresponsables de la política económica que está permitiendo recuperación del empleo».
«Esto está en juego: continuar con creación de empleo, con la recuperación económica inclusiva que lleve cada vez más gente o interrumpir por intereses partidistas la aplicación de políticas económicas que impulsan la recuperación económica y la creación de empleo», ha advertido.
El titular de Hacienda ha señalado que España ha vivido un periodo de interinidad «demasiado largo», algo que «no es conveniente», por lo que cree que estos PGE «tienen que contribuir a que se desatasque la interinidad en la política española.
De igual forma, ha avanzado que el incremento del 3,5% de afiliación permitirá que se creen más de 500.000 empleos este año en términos de contabilidad nacional, lo que a su vez contribuirá a que España se dirija a una reducción de las desigualdades y al «logro» de una recuperación «cada vez más inclusiva que llegue cada vez a más gente».
LAS PRINCIPALES CIFRAS
Montoro ha repasado las principales cifras del libro de Presupuestos, que incluye un límite de gasto no financiero, después de la cesión a los entes territoriales, de 133.055 millones de euros. Los ingresos tributarios antes de la cesión a los Entes Territoriales se incrementan un 7,9% respecto a la recaudación del año anterior, hasta alcanzar los 200.963 millones de euros.
Asimismo, el gasto no financiero de los ministerios asciende a 54.674 millones de euros, lo que supone una reducción de 3.490 millones respecto al presupuesto de 2016, dado que se ajusta la ejecución llevada a cabo en 2016, respetando las partidas del gasto social.
Por partidas de gasto, la financiación de las comunidades autónomas mejorará en 5.387 millones de euros, hasta un total de 99.822 millones en conceptos de recursos del sistema de financiación, y los recursos para Justicia crecerán un 7,6%, al tiempo que dependencia recibirá 100 millones de euros adicionales.
Las becas y los programas de refuerzo escolar tendrán un presupuesto un 1,7% superior, mientras que a fomento del empleo se destinará un 5,5% más. Asimismo, se dotan 342 millones de euros para la protección y la lucha contra la pobreza infantil; la financiación de la I+D+i crecerá un 4,1%, y se dotará con 100 millones adicionales la lucha contra el fraude fiscal.
Los Presupuestos incluyen una oferta de empleo público (OEP) para 2017 de alrededor de 67.000 plazas de reposición, y un proceso de reducción de la interinidad que conllevará la conversión de hasta 250.000 interinos en fijos en un plazo de tres años, con el fin de reducir la interinidad en las administraciones del 25% actual al 8% en ese periodo.
Además, fija un incremento salarial del 1% para los funcionarios, en línea con el aprobado el año pasado, tras su congelación durante los años anteriores de la legislatura de Mariano Rajoy y de 2011, con el Gobierno de José Luis Rodríguez Zapatero, que lo llego a bajar un 5% en 2010.
TRAMITACIÓN PARLAMENTARIA
Se prevé que la votación de las enmiendas a la totalidad se produzca en la primera semana de mayo. Si se supera ésta, el proyecto de Ley pasará a la Comisión de Presupuestos, donde se producirán las comparecencias de los secretarios de Estado de cada Ministerio y concluirá con un dictamen tras debatir las enmiendas.
La votación del Presupuesto por secciones una vez incorporadas las enmiendas, podría producirse la última semana de mayo. Si el Gobierno logra que sus cuentas superen esa votación, las cuentas pasarán al Senado donde el PP tiene mayoría absoluta.
Tras este trámite, el Ejecutivo espera que el Congreso apruebe definitivamente los Presupuestos la tercera semana de junio y las cuentas de 2017 vean la luz.
Tras ganar las elecciones en diciembre y poder formar Gobierno en minoría con el respaldo de Ciudadanos, el PP se ha estado reuniendo en los últimos meses con los grupos parlamentarios para recabar votos que se sumen a los de sus 137 diputados, más los 32 que tiene asegurados del partido de Albert Rivera, con la expectativa de que se puedan llegar a sumar los 5 del PNV y los dos diputados de Coalición Canarias y Nueva Canarias. También espera poder acordar con el PSOE que los Presupuestos pasen la votación de enmiendas por secciones.