El secretario general de CC.OO., Ignacio Fernández Toxo, y el de UGT, Pepe Álvarez, se reunirán con el presidente de la CEOE, Juan Rosell, y el de CEPYME, Antonio Garamendi, para intentar acordar una subida salarial para 2017.
Las organizaciones sindicales y empresariales acordaron durante la semana pasada desatascar la negociación, que permanecía en situación estática hasta el momento. Según han informado a Europa Press fuentes sindicales, «hay cierto ánimo por parte de todos para llegar a un acuerdo».
De hecho, los sindicatos están esperanzados en que la patronal haga un planteamiento que les permita llegar a un acuerdo «inmediato». El presidente de la CEOE ya afirmó esta semana que «esperaba que en la prórroga acabase con un acuerdo entre todos».
Rosell afirmó que pactar es «avanzar» y no pactar es «retroceder». También recordó que la patronal tiene «las ideas muy claras» y señaló que era consciente de que cuando la economía ya no está estancada y está en crecimiento trae como consecuencia una mejora salarial.
El desbloqueo se produjo a raíz de las movilizaciones que las organizaciones sindicales, CC.OO. y UGT, llevaron a cabo desde principios de año, por las que incluso llegaron a manifestarse ante las puertas de la sede de ambas organizaciones empresariales, donde reclamaron que se volviese a la senda de la negociación.
Retomar las negociaciones estuvo motivado por que la patronal decidió modificar su postura y aceptó que su propuesta no partiría de la congelación, ya que sindicatos afirmaron que «estarían dispuestos a modificar su posición siempre y cuando la patronal no partiese de la congelación de los salarios».
No obstante, no fue hasta el lunes pasado cuando en una de las reuniones entre los secretarios generales de CC.OO. y UGT y los presidentes de CEOE y Cepyme se produjo «cierto desatasque».
LLEGAR A UN ACUERDO A LO LARGO DE ABRIL
Las organizaciones sindicales y empresariales acordaron que había que «mover posiciones» y dieron órdenes a sus negociadores para poder llegar a un acuerdo a lo largo de abril, según fuentes sindicales.
Desde la parte sindical, se cree que el «espíritu de avanzar» de la patronal se debe, en parte, a que está habiendo algunos movimientos por parte de las patronales sectoriales en el ámbito de la negociación.
En concreto, el lunes pasado la patronal de grandes superficies, que engloba a empresas como El Corte Inglés, Carrefour o Ikea, «movió ficha» en las negociaciones del nuevo convenio colectivo de grandes almacenes, que afectará a unos 230.000 trabajadores, y realizó una propuesta de subida salarial del 2% para este año.
Fuentes sindicales informaron a Europa Press de que la patronal había mejorado su propuesta inicial, que incluía una subida del 1,5%, aunque creían que todavía era «insuficiente» para iniciar «una verdadera negociación», ya que «los datos del sector demuestran que se está produciendo una recuperación.
TENER EN CUENTA QUE MUCHAS EMPRESAS SIGUEN EN LA CRISIS
Por su parte, Rosell también señaló que era consciente de que había empresas con «muy buenos éxitos económicos» a las que se debería plantear la subida salarial de otra manera, al igual que habría que tener en cuenta que existen «muchas empresas» en España que todavía no han salido de la crisis, que siguen teniendo pérdidas y donde la situación «sigue empeorando».
Por otro lado, las organizaciones sindicales han subrayado que hay varias patronales sectoriales que creen que hay razones objetivas para que haya un incremento salarial y que no están dispuestas a que se genere una situación de conflictividad laboral que pueda hacer «peligrar sus beneficios».