Los pronunciamientos sobre reclamaciones que emita la Autoridad de Protección al Ahorrador e Inversor Financiero serán vinculantes, según ha explicado el presidente de la Comisión Nacional del Mercado de Valores (CNMV), Sebastián Albella.
«La creación de esta autoridad está relacionada con una directiva que, precisamente, lo que pretende es instaurar mecanismos vinculantes de resolución de reclamaciones», ha aclarado el máximo responsable del supervisor en relación con esta nueva Autoridad, cuya puesta en marcha anunció el ministro de Economía, Industria y Competitividad, Luis de Guindos, el pasado mes de enero.
En opinión de Albella, esto «lógicamente» pasa «por que las entidades se adhieran voluntariamente al sistema de resolución de conflictos» y ha señalado que «lo natural será que se adhieran».
Dado que la CNMV ya dispone de un servicio de reclamaciones, para Albella lo «lógico» es que las personas que trabajan allí se incorporen a la nueva Autoridad. «Las personas que tienen el acervo y la especialización de todos estos años en ese ámbito lo lógico es que pasen a la autoridad de reclamaciones», ha indicado el presidente del supervisor.
No obstante, ha señalado que en el departamento de inversores no solamente se tratan las reclamaciones, sino que también se hace el seguimiento de las entidades sin licencia, conocidas como ‘chiringuitos financieros’, y se desarrolla la atención a las consultas, por lo que el cambio podría afectar a diez o quince personas.
Para Albella, es una «idea razonable» la creación de una autoridad independiente de reclamaciones, aunque ha matizado que para la CNMV es muy importante que exista «coordinación» en este proceso.
Por otra parte, Albella ha calificado de «iniciativa razonable» la futura integración en la CNMV del Instituto de Contabilidad y Auditoría de Cuentas (ICAC), que actualmente depende del Ministerio de Economía, Industria y Competitividad.
Según ha explicado, algunos países europeos, como Italia y Holanda, cuentan con un esquema similar, en el que el supervisor contable y de la profesión auditora está integado en el supervisor de valores.
El presidente de la CNMV ha mantenido contactos con los supervisores de estos dos países y le han transmitido que «están muy satisfechos» con el esquema, ya que «ha contibuido a reforzar la intensidad y la solidez de la profesión auditora». «Estamos animados en el sentido de que puede ser bueno», ha añadido Albella.
LA INTEGRACIÓN DEL ICAC EN LA CNMV ES «RAZONABLE»
Además, considera «atractivo e interesante» que se integren en la CNMV las «dos caras» de la actividad del ICAC: la supervisión de la profesión auditora y la labor relacionada con la normativa y la doctrina contable.
En concreto, ha señalado que esta última «tiene especial interés», ya que implica que «el papel de propuesta en el ámbito normativo de doctrina contable corresponda a la entidad que, por defecto, tiene más sensibiidad en cuanto al impacto de la información financiera en los mercados».
«Es bueno que la actitud de quien esté en esa posicion sea la actitud de pensar en la información financiera desde la perspectiva de los mercados», ha añadido.
