La Autoridad Independiente de Responsabilidad Fiscal (AIReF) prevé que el crecimiento de la economía española se acelere más de dos décimas en el primer trimestre del 2017, hasta el 0,82%, respecto al último trimestre de 2016, cuando la economía española creció un 0,7%.
Estas son las últimas estimaciones realizadas por el organismo independiente de control fiscal, realizadas con una proporción baja de los indicadores observados, referidos por ahora al índice PMI de servicios.
La previsión supone un avance de un 0,12% sobre el crecimiento registrado en el cuarto trimestre del 2016, cuando se registró un alza del PIB del 0,7%, con lo que se cerró el ejercicio con un incremento del 3,2% anual, según el Instituto Nacional de Estadística (INE).
El crecimiento del 0,7% intertrimestral registrado en el cuarto trimestre de 2016 fue el mismo que el experimentado en trimestre previo, y con él se acumularon 13 trimestres de avances.
«VELOCIDAD DE CRUCERO»
Durante su comparecencia del pasado martes ante la Comisión de Economía en el Congreso de los Diputados, el ministro de Economía, Industria y Competitividad, Luis de Guindos, destacó que España mostró un crecimiento diferencial en 2016 y que la economía española es «más sostenible, equilibrada y robusta».
Guindos subrayó que la economía española está entrando en 2017 con «velocidad de crucero» y adelantó que en el segundo trimestre se habrán recuperado ya los niveles de PIB previos a la crisis, en buena parte gracias al resultado de las reformas implementadas en los últimos años.
En este sentido, recalcó que el crecimiento económico del 3,2% registrado el año pasado se produjo a pesar de que el Gobierno se encontraba en funciones, lo que a su juicio muestra que las medidas tomadas con anterioridad son las «adecuadas», por lo que abogó por continuar con la estrategia reformista de los últimos ejercicio.
No obstante, advirtió de que España es «vulnerable» a un repunte de los tipos de interés, dado su elevado endeudamiento, y alertó sobre que esto supondría un riesgo que se trasladaría con una «rapidez inusitada» y podría tener un impacto «rápido, intenso y negativo».
También previno sobre el giro «proteccionista» a nivel internacional que «puede limitar los mercados internacionales, haciendo hincapié en que cualquier medida que limite el comercio «tendrá un impacto negativo en todos los países».
