El presidente del IEE, José Luis Feito, ha señalado que únicamente es posible reducir el paro masivamente creando «empleo de baja calidad», porque la mayoría del empleo que se destruyó durante la crisis fue de esta índole.
«El crecimiento económico crea empleos de baja cualificación que son necesarios», ha subrayado Feito durante la presentación de su informe ‘Las consecuencias de la subida del salario mínimo en España’.
Así, ha recordado que entre 2008 y 2013, el empleo que se destruía era empleo precario. Por otro lado, ha afirmado que en este momento los sindicatos deberían alegrarse por la creación de empleo que se está llevando a cabo en España, ya que «cualquier noticia sobre creación de empleo es positiva, sea cual sea el empleo que se crea».
No obstante, el presidente del IEE ha destacado también que la «única» oportunidad de reducir la tasa de paro del 18,6% y de acabar con las bolsas de parados que no tienen formación es con el crecimiento del empleo cualificado.
Asimismo, ha señalado que es necesario que el crecimiento económico sea sostenible para volver a las tasas de paro que había antes de la recesión. «Subiendo el salario mínimo no se consigue mejorar la calidad del empleo, sino que se merman las oportunidades de los trabajadores, que podrían conseguir empleo en otras condiciones», ha añadido.
Por ello, Feito considera que para aumentar los salarios reales y los niveles de vida de los trabajadores hay que aumentar la competitividad del capital humano, hacer que la inversión empresarial crezca más que la población activa, difundir avances tecnológicos y mejorar la eficiencia para aumentar la productividad total de los factores.
Feito cree que con la subida del 8% del Salario Mínimo Interprofesional (SMI) se ralentizará la creación de empleo a tiempo completo, se fomentará la contratación temporal, la economía sumergida y se elevará el paro estructural de los trabajadores menos cualificados.
Sin embargo, también ha señalado que estos efectos «negativos» no tendrán visibilidad por la intensa creación de empleo que «seguirá caracterizando la actual etapa de expansión económica» por la que atraviesa España, pero cree que estos elementos perjudiciales sí se podrán ver en la siguiente etapa «contractiva» del ciclo económico.
Además, el presidente del IEE ha recordado que son las empresas las que determinan el número de personas que tendrán empleo a el nivel salarial que establece el SMI.
«El empleo tenderá a alcanzar el nivel en el cual su coste para las empresas iguale la contribución relativa de los trabajadores empleados a los ingresos de los mismos», ha afirmado, tras señalar que con la subida del SMI los «más perjudicados», que podrán perder su empleo o permanecer en el paro serán los trabajadores empleados o parados cuya productividad sea inferior.