El 58% de los usuarios de smartphones en España pagaría a través de su teléfono móvil en 2017, frente al 35% que declara hacerlo en la actualidad, según se desprende de un estudio elaborado por Ipsos, que confirma «la rápida difusión» de esta forma de pago entre segmentos muy diversos de la población.
El informe ‘Pagos por móvil en España. La perspectiva del consumidor’ refleja que la adopción de este nuevo formato ‘cashless’ no sólo aumentará en cuanto al número de nuevos usuarios, sino que también se diversificará el tipo de compras, pasando de una media de cuatro usos actuales a nueve.
Ipsos remarca que la normalización de la oferta, la simplificación en el uso y una mayor confianza del consumidor harán que, en un futuro cercano, el pago por móvil se integre en la «compra física» (pago por móvil en los establecimientos comerciales) y en el consumo cotidiano.
De hecho, el 51% de los consumidores señala que espera llevar a cabo pagos por móvil en tiendas físicas en el próximo año y uno de cada dos integrará este tipo de pagos en su consumo cotidiano.
Los usos más habituales proyectados por los consumidores se sitúan en el ámbito del pago del transporte público (60%), compras en supermercados (58%), combustibles (58%) entradas y espectáculos (57%). Con peso similar, aparecen ropa, calzado y accesorios en tiendas físicas (54%) y la comida y la bebida del día a día (53%).
PAGO POR MÓVIL: ESTADO INCIPIENTE
«Si bien el pago desde el móvil en plataformas de comercio electrónico o vía aplicaciones es ya relativamente frecuente, el pago en establecimientos comerciales a través de tecnologías NFC o Contactless todavía es muy incipiente», ha señalado el director de Loyalty & Customer Experience de Ipsos España, Jesús Caldeiro.
Sin embargo, ha subrayado que el lanzamiento de Samsung Pay y las últimas iniciativas anunciadas por Inditex, El Corte Inglés o las entidades financieras a través de Bizum, demuestran que los actores relevantes del mercado saben «que no hay vuelta atrás».
«El pago por móvil en España se encuentra en un momento de inflexión, y en muy poco tiempo, una vez las redes comerciales adapten su tecnología y las alternativas existentes ofrezcan una experiencia de usuario sencilla y segura, se convertirá en algo cotidiano», ha asegurado Caldeiro.
Por otro lado, el informe indica que las compañías de medios de pago son las que menos desconfianza generan en el consumidor a la hora de incorporar los pagos ‘contactless’ o NFC a su cotidianeidad, seguidas de las entidades financieras.
Para facilitar su adopción, Caldeiro ve necesario dar la impresión de que toda la industria actúa pensando en el consumidor, despejando todo tipo de incertidumbres en cuanto a seguridad y sencillez, y ofreciendo una experiencia de uso que mejore la actual. «En este contexto, la implicación de todos los agentes será imprescindible, en especial el comercio, bancos y compañías de medios de pago», ha añadido.
