El Departamento del Tesoro de EEUU ha acusado a la Comisión Europea (CE) de actuar como una «autoridad fiscal supranacional» a raíz de las investigaciones que Bruselas mantiene abiertas contra Apple y otras multinacionales como Amazon, Starbucks o Fiat por ayudas públicas ilegales en materia fiscal.
Los hechos se remiten a 2014, cuando la CE abrió investigaciones contra Irlanda, Holanda y Luxemburgo ante las sospechas de que estos países concedían ventajas fiscales indebidas, respectivamente, a las multinacionales Apple, Starbucks y Fiat, que pagan de esta forma menos impuestos de los debidos.
En un documento, el Tesoro norteamericano señala que las acciones tomadas por la Comisión Europea «menoscaban» los esfuerzos de EEUU para desarrollar normas de tarificación exterior e implementar la reforma fiscal acordada por el G20 y la Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económico (OCDE).
Asimismo, añade que la actitud de Bruselas cuestiona la capacidad de los Estados miembros para cumplir sus tratados fiscales bilaterales con EEUU.
«Este cambio de enfoque, aparentemente, expande el papel de la CE de la aplicación de la ley de competencia y ayudas publicas (…) hacia una autoridad fiscal supranacional que revisa las decisiones fiscales de los Estados miembros», reza el documento emitido por el Tesoro de EEUU.
En la nota adjunta al documento, el Tesoro indica que la evasión fiscal de las multinacionales es una «seria preocupación» para los EEUU y cita la propuesta de la Administración Obama para solucionar esta cuestión.
Sin embargo, subraya que la CE no debe imponer sanciones a estas multinacionales de forma «retroactiva» porque siembra un «mal precedente» para las autoridades fiscales de todo el mundo.
La CE reclama que Fiat y Starbucks devuelvan entre 20 y 30 millones de euros por ventajas fiscales recibidas en Luxemburgo y Países Bajos, respectivamente, al concluir tras una investigación que constituyeron ayudas públicas ilegales, aunque ambas compañías han apelado al Tribunal General de la Unión Europea.
En el caso de Apple y Amazon, la evaluación preliminar de Bruselas estima que las ventajas fiscales concedidas por Irlanda y Holanda a Apple y Amazon, respectivamente, podrían constituir ayudas públicas ilegales, por lo que la firma de la manzana se podría enfrentar a una multa de miles de millones de euros.