Son muchos los temas de liderazgo que conforman el discurso del éxito. Para nosotros hay al menos 4 temas imprescindibles que un buen líder no puede obviar y que resumimos en este ranking:
Hacer coaching
El coaching es un tema de liderazgo recurrente por una poderosa razón: el desarrollo del talento en las empresas depende en gran medida de la capacidad de sus líderes para desarrollar a sus equipos.
Cuanto más se preocupe un líder por desarrollar y maximizar el talento y las habilidades de sus empleados, tanto más alto será el rendimiento de toda la organización. El coach busca instruir y entrenar a una persona (coachee) o a todo un equipo para que éstos desarrollen competencias específicas y mejoren el desempeño de sus funciones.
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Agilizar la comunicación
La comunicación es un asunto de liderazgo clave en la gestión de equipos eficientes. Un líder tiene que ser capaz de comunicar con claridad los objetivos y lo que espera de cada uno de los miembros de su equipo, de manera que:
- Aquellas personas que no estén obteniendo buenos resultados, corrijan su comportamiento para mejorar.
- Aquellos que están cumpliendo sus metas mantengan alto su nivel de motivación.
- Las personas infrautilizadas encuentren tareas acordes con sus capacidades.
- La organización promueva el trabajo en equipo.
- Exista una dinámica de mejora continua que posibilite la consecución de objetivos.
Facilitar el camino a tu equipo
Una de las más importantes responsabilidades que asumen los líderes es garantizar los recursos necesarios para que su equipo lleve a cabo sus tareas con eficiencia. En cuestiones de liderazgo, es primordial optimizar al máximo los medios con los que contamos para dar el máximo.
Para allanar el camino y hacer más fácil el trabajo diario, el líder puede y debe realizar acciones encaminadas a ofrecer los recursos, las herramientas y los sistemas necesarios para que el equipo pueda hacer bien su trabajo.
Centrarse en lo importante
Muchos confunden el liderazgo con asumir un gran número de tareas. A menudo el exceso de carga de trabajo es sinónimo de hacer mucho y liderar poco. Los líderes deben centrarse en lo importante, comprometerse en sacar adelante aquello que es verdaderamente crucial para el éxito de su organización.
Muchos equipos se derrumban cuando sus líderes están más preocupados de actividades irrelevantes que no aportan a la consecución de los objetivos. Estos managers con frecuencia se pierden en distracciones, detalles nimios, discusiones que no van a ningún lado. Un líder debe ser un gran priorizador (para él y para su equipo).